viernes, 13 de septiembre de 2019

Hay un pueblo de por medio que ve pasar la vida y por eso duele. Cuba duele.

José Luis Pérez Parra
en determinados indicadores económicos vinculados a la agricultura, industria, producción nacional, el comercio interior y de exportación fueron los primeros síntomas de una crisis económica y financiera. Esos mismos síntomas, se perciben en el actual panorama que atraviesa la isla, aunque se insista en que el país está en mejores condiciones que antaño.
Habrá quienes se alegren de la nueva situación pero no serán aquellos que tengan frescas en su memoria las disyuntivas para garantizar la dieta alimenticia básica y diaria que se sucedieron hasta alcanzar nivelesNo impensables.
Cuba duele porque aunque no se habla de "período especial" se plantea una nueva "coyuntura" y duele porque tiene que doler si allí están los nuestros, los motores que nos impulsan, esos que ven pasar los días en una verdadera lucha por la sobrevivencia y que son jornadas que no se recuperan porque no somos eternos. Muchos han muerto preguntándose ¿Mejorará esto algún día?.
Y ahora una nueva "coyuntura". La esperanza de que llevar a diario la comida a la mesa sin que sea una odisea se disuelve como el azúcar en aquel vaso de agua que sustituyó a la leche en el período especial.
Sé que en la voluntad de muchos está "resistir " y que lo asumirán con honor, pero no es justo venga de donde venga, ya sean las causas externas o internas ( reales, objetivas) que provocan este recrudecimiento de la crisis económica cubana. Hay un pueblo de por medio que ve pasar la vida y por eso duele. Cuba duele.

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